LOS ROEDORES...


Son vertebrados, mamíferos de tres familias de roedores: Múridos, Cricétidos y Platacantómidos, una de las cuales comprende a las ratas. Las ratas poseen dientes muy poderosos con lo que pueden llegar a roer las paredes de madera de los graneros para conseguir comida; se sabe que son incluso capaces de agujerear tuberías de plomo, la rata gris (Rattus norvegicus) suele vivir en lugares muy húmedos, siendo la que más ha proliferado en el entramado de las alcantarillas, nadadora extraordinaria y escaladora aceptable.
Es omnívora, igual puede alimentarse de insectos, como de sus cadáveres, vegetales o materiales muy diversos (papel, madera, goma, plomo, estaño, plástico), pudiendo ingerir cada día un tercio de su peso.
Construyen los nidos en agujeros debajo de la tierra o dentro de las alcantarillas y penetran en las casas en busca de alimento para volver al nido donde alimentan a las crías, aunque en el caso de encontrar un lugar apropiado es posible que hagan el nido dentro o cerca de las instalaciones construidas por los humanos.
La hembra da luz a los 21 días, pueden tener camadas de 5 a 14 crías, las que alcanzan su madurez sexual a los 2 meses. El número de partos por año que pueden tener las hembras es variable y sucede en función de las condiciones de temperatura, disponibilidad de alimento o facilidad en la construcción de nidos apropiadas..
Su actividad es principalmente crepuscular y sus recorridos dentro de los edificios acostumbran a seguir las esquinas de las paredes, donde se siente más seguras por tener un lado protegido. En descampados prefieren seguir la vía más corta, aunque esto suponga atravesar espacios descubiertos.
La rata gris es bastante destructiva, causa daños serios en almacenes de comida y grano, participa en la transmisión de enfermedades como la rabia, la peste bubónica o el tifus y ataca a animales domésticos, aves de corral y, en ocasiones, al ser humano. Cuando descubren un nuevo alimento todo su comportamiento es extraordinariamente desconfiado, primero lo prueba uno de los componentes de la comunidad y en el caso de que muera, es rechazado por todos los miembros durante el resto de su vida. A causa del éxito reproductor de estos roedores, el control de sus poblaciones se ha convertido en un problema importante. Se suelen utilizar venenos para controlar las plagas que llegan a constituir. Estos venenos son muy peligrosos y sólo deben ser manipulados por profesionales especializados.
Hay que destacar la facilidad de inmunización de estos mamíferos frente a cualquier materia venenosa, gracias a mecanismos que cambian su metabolismo o a la práctica del canibalismo que les permite ingerir pequeñas dosis del veneno para eliminarlas, facilitándoles la inmunización.